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Juan José Domínguez

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Economía

miércoles, 17 de marzo de 2010

De los planes de pensiones y otros menesteres

Por EL FILIBUSTERO
Sin plan de pensiones

Es realmente difícil poder enumerar todas y cada una de las animaladas que ha sugerido o ha llevado a la práctica el gobierno de la nación para intentar poner freno a la crisis económica en la que estamos sumergidos. Un gobierno que, en un alarde de sabiduría e innovación, sacó de la noche a la mañana aquello que bautizó como “ley de economía sostenible”; algo sumamente curioso e intrigante, teniendo en cuanta que tras dicha ley, los mismos gobernantes han sacado a relucir medidas tan subjetivamente sostenibles como el incremento del IVA, la jubilación a los 67 años, o la última sugerencia, tan sutil que no ha pasado desapercibida a nadie, que no es otra que los cánticos y alabanzas a los planes de pensiones privados.

Muy sutil. Que el gobierno no tiene un duro, ya lo sabemos; y que mientras siga gobernando ZP tardarán años en reconocerlo, también.

¿Qué es un plan de pensiones? La primera definición que nos viene a la cabeza, gracias a las campañas publicitarias de bancos y cajas, es que se trata de un producto financiero. Ya empieza a sonar mal. Un producto financiero consistente en que usted va depositando mensualmente una cantidad X y de la que le garantizan que en un futuro obtendrá una rentabilidad Y.

Resumiendo, el banco coge tu dinero, lo invierte donde cree conveniente, y al cabo de un tiempo (suele haber importantes restricciones respecto a la disponibilidad del capital invertido – si no que se lo pregunten a los clientes del Santander) te lo devuelve con intereses, salvando las excepciones que se encarga de establecer la letra pequeña de los contratos. Es decir, que es exactamente lo mismo que ahorrar mediante inversiones. Por ejemplo: comprarse un piso y venderlo en el momento de la jubilación (puedes obtener una plusvalía y además puedes ganar más dinero si mientras tanto consigues alquilarlo), invertir en bolsa (esto tiene más riesgo), y/o comprar bonos o letras del estado (que es lo que debería sugerir el Gobierno en una situación en la que empieza a estar necesitado).

Bien, como vemos a grandes rasgos, un plan de pensiones es un plan de ahorro que promete ciertos intereses, nada malo; pero la realidad indica que hay muchas familias que no pueden ahorrar ese dinero, puesto que esos “excedentes” los necesitan para mantener una mínima calidad de vida. Sin embargo esto es algo que no parece preocupar a un vividor de la política como Celestino Corbacho, quien parece no conocer las necesidades reales de muchos españoles: comenzando por el Vicepresidente del Gobierno, el señor Manolo Chaves, quien según declaraciones formales, cuando se retire, va a tener pocos recursos más que la pensión de jubilación estatal.

Lo del vicepresidente, así como lo del señor Camps, es de juzgado de guardia e indica la necesidad imperiosa de fiscalizar las operaciones vinculadas (movimientos de cuentas) entre los políticos y sus familiares (en empresas la nueva legislación del Impuesto de Sociedades obliga a justificar las operaciones vinculadas hasta en un tercer grado de parentesco) para conocer cómo afecta su participación en la función pública a su entorno familiar. Seguramente el resultado sería sorprendente.

Volviendo a los planes de pensiones, no hay nada malo en decirle a la gente que por si acaso ahorre, pero sí que resulta patético y negligente que el ministro de trabajo lance ese mensaje mientras sigue subiendo la cifra de desempleo, sobre todo cuando su trabajo, en coordinación con otros ministerios, principalmente de economía e industria, debería estar centrado en la creación de empleo. Sin embargo, el gobierno sigue a la deriva. En lugar de potenciar el consumo (guste o no, vital para mantener el sistema circulatorio de nuestro modelo económico) propone medidas para frenarlo, como por ejemplo el incremento del IVA o la ampliación de la edad de jubilación (ralentiza el acceso de los jóvenes al trabajo)

Si analizamos fríamente las medidas, veremos que son medidas dirigidas exclusivamente a incrementar la recaudación de fondos por parte del Estado. No tienen nada más detrás. Se plantean medidas a largo plazo (el IVA una vez subido no lo va a bajar nadie) como solución al problema de liquidez que tienen a corto.

En definitiva, una de las cosas que más sarpullidos pueden producirle a uno es tener que darle la razón a Mariano, pero no me valen las disculpas de ZP reconociendo más de un año después que la crisis es más importante de lo que pensaban, o escuchar a la Salgado diciendo que, efectivamente, se han equivocado al quitar el impuesto de patrimonio. Y no sería de extrañar que dentro de unos meses también reconozcan que se equivocaron con el IVA, con el Plan E y con todo lo demás (salvo la bajada de IVA para rehabilitación de viviendas – alguna tenían que acertar)

Bien, pues si cometen tantos errores y son capaces de reconocerlos, también podrán reconocer que no están preparados para gobernar un país de la magnitud de España. Así que les recomiendo que en primer lugar echen a la calle al asesor económico de la Moncloa, y después hagan las maletas y se marchen para dedicarse a lo que saben hacer bien: convocar un congreso extraordinario del PSOE con carácter de urgencia y anticipar unas elecciones en el país.


5 comentarios: on "De los planes de pensiones y otros menesteres"

Juli Gan dijo...

Ya se sabe que la campaña orquestada por 18 grandes empresas de este país (entre otras el banco santander, BBVA, Iberdrola, Repsol, timofónica o el cortijo) de "estoloarreglamosentretodos" significa que los imbecilicos de a patica como nosotros pagamos a escote sus lujos. Sube el IVA, pero dejemos a un lado los de patrimonio, no sea que por declarar los múltiples sueldos de la Pajín, el IRPF no le salga a devolver.

Anónimo dijo...

Comentario al txitorro del día:


El guindi nació el mismo año que Maradona metió el gol en recorrida memorable y el de la mano de Dios en México. Qué viejos somos, y él que lo va a ser, pasado mañana, porque en Francia para estas cosas aplican la cadena perpetua. Con el agravante para él de que no le dejarán de considerar un español, durante toda su vida, que se ha cepillado a uno de los suyos.

24 años y ya jubilado, para los restos, ni obras va a poder ver. El se lo pierde. ¿Hasta cuándo seguirán saliendo nuevos etarras?

Xisto de la lista dijo...

Filibustero o mercenario al servicio de la troika comunista, vertebrada bajo la cosecha judeomasónica de las siete plagas de Egipto.
Sí, tú, merluza rebozada con huevo sin clara, sabemos quién eres alborotador de conciencias, difamador de tormentos contra el gloroioso.

Itzain dijo...

Por si alguien tenía algún resto de duda sobre a quién sirven PP, PSOE, CCOO, UGT, PNV etc, etc...
Dicen l@s que saben del tema (por vivir de ello) que cuando el negocio de las pensiones flojea, La Banca (en generás) pone al gobierno de turno a hacer campaña diciendo que se acaba el dinero de la SS, que no va a haber para pensiones, y que hay que hacerse planes privados.
Y no van una, ni dos , ni tres veces.
Y el personal seguimos comiéndonos los mocos y votando a sus títeres, mientras los amos juegan con nosotr@s al bonito juego de la deslocalización, la precariedad, la privatización de los servicios públicos y el engorde ilimitado de sus plusvalías.
Nada, nada... Navarra va bien.

(Sobre las pensiones)
http://altsasu-zaindu.blogspot.com/2010/02/pentsioa-ere-lapurtu-nahi-digute.html

felicitat dijo...

Cree usted Sr. Filibustero que nos queda algo para pensionarnos después de usurparnos para pensiones por Real Decreto? Lo dudo, discrepo tener que pagar pensiones por dos lados, no es justo.