El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Villaba-Atarrabia, José Luis Úriz, escribe este artículo desde Catalunya, a donde se ha trasladado recientemente, y establece algunas comparaciones entre militantes del PSC y militantes del PSN. Pide "altura de miras" a los líderes de su partido para colocar en las listas navarras a personas euskaldunes, y da incluso nombres para esos puestos.
Llevo poco tiempo en Catalunya, sin dejar mi vinculación con mi querida Navarra, pero lo he aprovechado bien especialmente en conocer todo tipo de personas especialmente que se mueven en el mundo político, y más concretamente en el espectro de la izquierda. Entre ellas una me ha producido un impacto, me ha impresionado profundamente por su serenidad, claridad de ideas y contundencia a la hora de defenderlas, en público y en privado. Esa persona se llama Montse Tura.
En la sociedad en la que vivimos lamentablemente no abundan gentes así, tampoco en los partidos que representan a la izquierda entre los que incluyo el mío, el PSOE. Las veces que he hablado con ella, y han sido ya unas cuantas en estos últimos meses, he percibido que más allá de las diferencias derivadas del lugar de nacimiento, coincidimos en el fondo y en la forma, en lo ideológico y también en el modelo de partido que defendemos, ella en el PSC yo en el PSN, en la táctica y en la estrategia.
No voy a profundizar en esos aspectos porque estas breves líneas las escribo para hacerme eco de una noticia aparecida hace unos días en La Vanguardia, en la que informa de los movimientos que existen en el PSC apoyando que ella sea el apoyo imprescindible para que José Montilla y el PSC ganen las próximas elecciones autonómicas.
La sitúan en el sector “catalanista” aunque mi sensación es que realmente defiende posiciones nítidamente de izquierdas, en un momento de gran ambigüedad en el seno de esta ideología en la que también milito. Quizás el término “catalanista” sea peyorativo, para intentar ocultar que representa realmente la defensa de los valores de una izquierda a la baja en los partidos que dicen representarla.
Posee varios elementos que asustan al poder establecido dentro y fuera de los partidos: es de izquierdas, defiende con pasión y convicción sus ideas, próxima a la ciudadanía, lo dice públicamente con valentía, y es mujer.
Por eso, por todo eso que representa, el PSC la necesita en el lugar que ambos merecen, justo detrás de su líder. No siempre quien más lo merece es quien está, los aparatos (aparatejos debería decir) controlan que las gentes como ella no tengan demasiada relevancia, porque su fuerte personalidad hace sonrojar a los burócratas. Apoyemos su candidatura, con todo, seamos una ola gigantesca que la lleve hasta la orilla de las listas en el lugar que le corresponde: ¡el 2!
Por cierto que como ya señalé en mi intervención en el Comité Regional del PSN, también aquí es necesario, imprescindible fortalecer nuestra ala más euskaldun, incluso carecemos de gentes que lo hablen. Equiparando lo que ocurre en el PSC, el equivalente de Montse Tura sería Ainhoa Aznárez, joven, mujer, válida, con una buena relación social, y euskaldun. ¿Os imagináis a Ainhoa como número dos del PSN detrás de Roberto? Sería muy positivo para nuestras aspiraciones, pero imposible por la poca altura de miras de algunos. En fin, habrá que esperar a otros tiempos que seguro vendrán, seguro.
En la sociedad en la que vivimos lamentablemente no abundan gentes así, tampoco en los partidos que representan a la izquierda entre los que incluyo el mío, el PSOE. Las veces que he hablado con ella, y han sido ya unas cuantas en estos últimos meses, he percibido que más allá de las diferencias derivadas del lugar de nacimiento, coincidimos en el fondo y en la forma, en lo ideológico y también en el modelo de partido que defendemos, ella en el PSC yo en el PSN, en la táctica y en la estrategia.
No voy a profundizar en esos aspectos porque estas breves líneas las escribo para hacerme eco de una noticia aparecida hace unos días en La Vanguardia, en la que informa de los movimientos que existen en el PSC apoyando que ella sea el apoyo imprescindible para que José Montilla y el PSC ganen las próximas elecciones autonómicas.
La sitúan en el sector “catalanista” aunque mi sensación es que realmente defiende posiciones nítidamente de izquierdas, en un momento de gran ambigüedad en el seno de esta ideología en la que también milito. Quizás el término “catalanista” sea peyorativo, para intentar ocultar que representa realmente la defensa de los valores de una izquierda a la baja en los partidos que dicen representarla.
Posee varios elementos que asustan al poder establecido dentro y fuera de los partidos: es de izquierdas, defiende con pasión y convicción sus ideas, próxima a la ciudadanía, lo dice públicamente con valentía, y es mujer.
Por eso, por todo eso que representa, el PSC la necesita en el lugar que ambos merecen, justo detrás de su líder. No siempre quien más lo merece es quien está, los aparatos (aparatejos debería decir) controlan que las gentes como ella no tengan demasiada relevancia, porque su fuerte personalidad hace sonrojar a los burócratas. Apoyemos su candidatura, con todo, seamos una ola gigantesca que la lleve hasta la orilla de las listas en el lugar que le corresponde: ¡el 2!
Por cierto que como ya señalé en mi intervención en el Comité Regional del PSN, también aquí es necesario, imprescindible fortalecer nuestra ala más euskaldun, incluso carecemos de gentes que lo hablen. Equiparando lo que ocurre en el PSC, el equivalente de Montse Tura sería Ainhoa Aznárez, joven, mujer, válida, con una buena relación social, y euskaldun. ¿Os imagináis a Ainhoa como número dos del PSN detrás de Roberto? Sería muy positivo para nuestras aspiraciones, pero imposible por la poca altura de miras de algunos. En fin, habrá que esperar a otros tiempos que seguro vendrán, seguro.
2 comentarios: on "Apoyo a Montse Tura... en Navarra también"
Hay algo que siempre me ha llamado la atención de la izquierda, y es precisamente su vocación internacionalista y solidaria. Al menos en teoría, ya que no siempre se cumplen esas premisas. Nunca comprenderé el ansia de identificación nacionalista de ciertos sectores "izquierdistas" que en vez de buscar la mejora social se empeñan en la mejora de "su" situación social.
Igual el autor apunta a otro concepto que aquí está muy denostado: regionalismo. Una cosa es representar una sociedad (el consevadurismo y UPN, aquí en Navarra) y otra bien distinta es amar la propia tierra. La cultura, de carácter innegable euskaldún, y la tierra, Navarra (que para eso son autonómicas aquí y no en Cuenca). Yo estoy plenamente de acuerdo, apuntando que el que quiera gobernar Navarra debe saber gobernar conservadores, nacionalistas, socialistas y hasta carlistas. Y a los de NaBai, que no sé muy bien dónde situarlos. Personalmente un amante de esta tierra por encima de etiquetas, y que apueste por lo social, me parece indicado. Quizá estemos de acuerdo.
Lo que no me gusta tanto es la idea de "político a medida". El situar en las listas mujeres u hombres es lo de menos, euskaldunes o no. Lo importante es saber trabajar con la gente adecuada para solucionar los problemas en Navarra. Algunas cualidades ayudan, como estar cerca de la gente, comprender la cultura, amar la tierra... pero el sexo, me parece discriminatorio e innecesario. La mujer vale tanto como el hombre, lo que no hay que tener es miedo a poner a una mujer válida por su sexo. Pero ponerla por él, me parece igual de malo.
Siento la chapa y, aunque parezca mentira, más o menos suscribo lo que dice José Luis.
Será una suerte para el PSN y Navarra si este buen hombre se queda por allí.
La segunda opción sería adherirse al internacionalismo nacionalista y sabiniano de Madrazo, pero ese ya no tiene teta de la que mamar.
Así pues, y descartado que se nos encierre en un convento o nos deleite con el desarrollo de la teoría del Tonto Util en un pequeño rincón del mundo mundial, le quedan unos meses para inventarse una nueva boutade de la que vivir y salir en fotos los próximos 4 años.
Es el destino.
Publicar un comentario