Pero, ¿para qué cojones es el cambio?

Por ELOY RABO

Opinador de barra de bar

Francisco, Patxi para los amigos que hizo hace 40 años cuando llegó aquí, es un compañero del Metal: con mayúscula, porque es de la Federación del Metal de la UGT de Navarra. Un casta. Coincido con él cuando me tomo el vino del mediodía por el Casco Viejo. Suele estar siempre en los mismos bares, disfrutando de la jubilación con cosecheros y la prensa diaria. Camisas de cuadros abiertas hasta el tercer botón y una cadena con una virgen de su pueblo natal, allá por Badajoz. Así que, cuando hay asuntos de UGT, me pego a él para que me explique cosas. Por ejemplo: la foto de la Plataforma “No digas que no se puede”, por el cambio político en Navarra. En ella estaba, entre otros, Miguel Ángel Ancízar, del que creo que Patxi es devoto porque a Patxi le ha gustado ganar siempre, "cagonros, como sea".

- A ver, Patxi, que me he perdido algún capítulo. Tu ex jefe, por el cambio.
- Con dos cojones, sí señor.
- Pero, ¿a Ancízar no le tocaba las pelotas en 2007 que el PSN fuera a gobernar con NaBai? ¿No es uno de los que mandan en el PSN y en la UGT, aunque ya no tenga cargo?
- Sí señor, con dos cojones.
- Pues entonces no entiendo qué cambio quiere ahora, si en 2007 no quería.
- Pero vamos a ver, Rabo, ¿quién te ha dicho a ti que el cambio pase por los naguays?

Anda la osa. Esa respuesta no me la esperaba. Le pedí al camarero otros dos vinos, porque la explicación prometía ser un diálogo platónico.

- Mira, tú: Ancízar ha estado siempre bien ubicado. Porque sabe moverse, con dos cojones – me decía Patxi, sorbo va, sorbo viene -. Y chico, apoyar a UPN está bien, pero no hay que hacerlo siempre.
- Pero a ver: ¿Ancízar no tiene intereses inmobiliarios? Que yo no lo sé, que lo he leído por ahí.
- Sí, sí, con dos cojones.
- Y Ancízar, ¿no está conforme con lo que haya podido sacar con esto de la estabilidad?
- Claro que estará conforme, chico, pero hay que posicionarse, que el año que viene hay elecciones.
- Ya. Pero entonces, ¿ahora quiere pactar con NaBai? ¿O se apunta en la foto por si el año que viene hay que pactar con ellos?
- Que no, copón. Hay más cambios posibles. Porque, a ver: ¿a quién ha apoyado el PSN hasta ahora?
- A UPN.
- ¿A qué UPN?
- ¿Cómo? – Patxi me había descolocado con su repregunta.
- Pues al UPN de Sanz, Rabo. ¡Al de Sanz! Pero en 2011 UPN es el de Barcina. Y no es lo mismo.

Estaba al borde de perderme en el razonamiento del sindicalista. Le miraba a su medalla de oro como si el santo fuera a hipnotizarme.

- Coño, Rabo. Si tú lo has dicho. ¿No tiene Ancízar cosas de construcción?
- Sí.
- ¿No es uno de los mandamases del sindicato?
- Pues... sí.
- ¿Y qué ha dicho Barcina sobre la construcción, la vivienda y los sindicatos?

Vale, me iba ubicando.

- Pues que no está a favor de lo que han pactado UPN y PSN.
- Eso es. Lo que ha pactado el partido con el UPN de Sanz. O sea, que con el UPN de Barcina, eso no podría pactarse. O sea, que con el UPN de Barcina, construcción, vivienda y sindicatos... todo eso, a tomar por culo.

Toma ya. O sea, que la clave, como siempre, era el bolsillo, y no la cabeza. Del corazón, ni hablamos.

- Entonces, el cambio...
- El cambio será lo que sea y con quien sea. ¿No ha pactado Patxi López con el PP? ¿No va a haber PP en Navarra en 2011? Pues eso. Con dos cojones. El cambio, Rabo.
- O sea: el cambio para que nada cambie.
- Ehhhhh... ¡Joder, qué cabrón eres! Siempre le das la vuelta a las cosas. ¡Con dos cojones!