Los que juzgan al Estado de Israel

Por XABIER ETXEBERRIA

Reflexivo y reflexionante

Ahora que ha bajado la marea por el injustificado asesinato de los cooperantes internacionales que intentaban entrar a Gaza, la “moda palestina” empieza a pasar. Hamas, con su habitual aprecio por los palestinos de a pie, ha dicho que “no acepta migajas” de Israel. Por otro lado, los países árabes se acuerdan ahora de los palestinos y piden un “corredor marítimo” para poder acceder a la Franja. Lo curioso es que un estado fundador de la Liga Árabe como Egipto se pida a sí mismo levantar el bloqueo de Gaza. El Estado egipcio hace frontera, al igual que Israel, con la Franja de Gaza. De hecho, el bloqueo hubiera sido imposible, como asegura en El País el filósofo Henry-Lévi, sin “el beneplácito apenas disimulado de todos los regímenes árabes moderados”. Y ahí no queda todo. El estado que más cargó contra los israelíes fue Turquía. Curiosamente, su único aliado en la zona.

El país otomano siempre ha sido reconocido por su humanismo. Aun así, esta vez tenía razones para protestar porque era la patria de los barcos asaltados en aguas internacionales. Unos barcos que partieron de la Chipre invadida por Turquía y que seguro que no llevaban banderas armenias ni kurdas. Porque Turquía aún sigue persiguiendo a quién denuncia el genocidio armenio o sigue negando la existencia del pueblo kurdo. Pero así está el mundo: quien invade un país como Chipre o intenta ocultar su historia, se dedica a juzgar a los demás estados. De la misma manera actuó Irán, uno de los pocos países del mundo en el que no hay homosexuales, y en el que se patrocina el “negacionismo” o, lo que es lo mismo, negar que existió un Holocausto en la Alemania nazi que se llevó por delante a 5 millones de judíos y a otros tantos individuos que fueron asesinados por no gustarles a los nazis. Esta vez, el presidente iraní habló de “acto inhumano”, pero no se acordó de lo “inhumanas” que fueron sus fuerzas armadas en las últimas elecciones iraníes cuando reprimieron a los que no estaban de acuerdo con él. Parece ser que algunos tienen muy mala memoria.

Este artículo no es una justificación a la barbaridad que cometieron el otro día las fuerzas armadas de Israel. Estas líneas están escritas para mostrar la hipocresía de la Política Internacional que condena y utiliza de chivo expiatorio a quién quiere, cómo quiere y cuándo quiere. Parece ser que en la Geopolítica los palestinos son otra pieza de ajedrez para desplazar el actual status-quo mundial. No importa cuántos mueran, ni cómo mueran. Lo importante es echar a Israel y sepultar a Estados Unidos. ¿Cómo explicar, si no, que Chávez y Ahmadineyad sean tan “amigotes”?

Es repugnante que los que se autoproclaman “campeones de la ética”, aquellos que cogen un altavoz para “abrir los ojos al mundo”, griten cuando a un palestino le pisan un pie, pero callen cuando al Tibet lo revientan a palos o cuando en Cuba no hay más que “Pensamiento Único”. Los que juzgan con tanta energía a Israel bien harían en juzgarse a sí mismos antes de hacerlo con los demás. Por otro lado, el Gobierno israelí bien haría en ver que ha metido la pata. Quien se dice defensor de los Derechos Humanos debe acatarlos en todo momento y ser mejor que quién los ataca. No valen venganzas; valen ejemplos.

Para enviarnos sus comentarios en forma de artículo, a su disposición el mail redaccion@latxistorradigital.com.