Por ELOY RABO
Analista de manifestaciones desde el sofá
Manifestantes todos (dos puntos):
Menudo fin de semana, Mikelarena. A la gente le ha dado por la movilización (aunque otros lo llamarían aborregamiento). Coches para aquí, trenes para allá y controles de la Guardia Civil en el peaje de Zarautz, por si el Cristo montado era poco. En San Sebastián, el sábado, “todos los derechos para todos”. En Madrid, también el sábado, “el aborto no es un derecho, sino un asesinato”. En la Sakana, el domingo, “nos asesinan un derecho”. Así, grosso modo y para no repetir los eslóganes.
Lo de San Sebastián – Donostia, o Donostia - San Sebastián, ha traído tela y traerá telares. Que si el PNV está o deja de estar, que si primero da libertad a la militancia pero luego van los cinco “jefes provinciales del Movimiento”, aunque no el presidente… Luego va algun exaltado y suelta la consigna dura del momento, pillando en bragas a Ortúzar, Egibar, Gerenabarrena, Agirrebengoa y Noblia (intenten decir los cinco nombres seguidos con un polvorón en la boca y ya verán el descojono). Y de noche, cuando los cinco y el resto de moderados se han ido, van otros y se ponen a quemar cajeros y autobuses. Y ahí salen PP y PSE a decir primero que dónde van los jeltzales, que eso es como volver a Lizarra… y dos días después dicen que tampoco es para tanto, que se han equivocado pero que Urkullu ya lo ha explicao, plas, plas, palmadita en la espalda y a pactar los Presupuestos.
En Madrid, la gracia no está en los gritos coreados (no tenían manera de rimar “aborto”, “Zapatero” y “abuelo republicano”, así que la cosa quedó sosita), sino en el número de asistentes. Es más fácil acertar una quiniela de 14 que saber cuántas personas acudieron. Entre 60.000 y dos millones, no vale aquello de hacer la media aritmética. Allí estuvo el PP, UPN, las asociaciones de la familia, los curas de sotana rancia y los de birrete, la COPE, María Ostiz y (¡cielos!) Minerva Piquero (con lo buena que está); y probablemente andarían por ahí el Foro de Ermua y la AVT, que no se pierden una por si acaso pueden usarla en beneficio propio. El PNV, pese a ser un partido católico por convicción, no estuvo. Andaban en San Sebastián, hay que entenderlo.
Y lo mismo, esa falta del don de la ubicuidad, le pasó a UPN el domingo en el Nafarroa Oinez. Aunque el tren Pamplona – Madrid para la mani, al módico precio de 25 euros ida y vuelta, hacía el viaje en el día, muchos no llegaron a tiempo para ir luego a la Sakana. Seguro que querían estar, no les quepa duda. Eso sí: a más de uno se le habrían abierto las carnes al ver que la pancarta de despedida a los participantes en el Oinez, ésa en la que ponía “Eskerrik asko”, la colocaron en un puente de la autovía A-10. En el mismo sitio, vaya, donde se ponen las de AHT Gelditu o las de Non da Jon. Como algun juez tenga conocimiento de que se comparten espacios, lo mismo Paz de Ziganda se ahorra la organización de la fiesta del 2010. Ojito.
Al final, viendo el Teleberri, uno no sabe si en Sakana se pedían todos los derechos para los que aborten o si en Madrid pedían euskera para todos. Pero, ¡qué quieren que les diga!, esto le da vidilla al sábado y al domingo. Los fines de semana que se limitan a fútbol y misa son aburridos. Ponga una mani, o dos, y todas las televisiones se lo agradecerán. Si hay hostias aparte de las obleas litúrgicas, ni les cuento.
Lo de San Sebastián – Donostia, o Donostia - San Sebastián, ha traído tela y traerá telares. Que si el PNV está o deja de estar, que si primero da libertad a la militancia pero luego van los cinco “jefes provinciales del Movimiento”, aunque no el presidente… Luego va algun exaltado y suelta la consigna dura del momento, pillando en bragas a Ortúzar, Egibar, Gerenabarrena, Agirrebengoa y Noblia (intenten decir los cinco nombres seguidos con un polvorón en la boca y ya verán el descojono). Y de noche, cuando los cinco y el resto de moderados se han ido, van otros y se ponen a quemar cajeros y autobuses. Y ahí salen PP y PSE a decir primero que dónde van los jeltzales, que eso es como volver a Lizarra… y dos días después dicen que tampoco es para tanto, que se han equivocado pero que Urkullu ya lo ha explicao, plas, plas, palmadita en la espalda y a pactar los Presupuestos.
En Madrid, la gracia no está en los gritos coreados (no tenían manera de rimar “aborto”, “Zapatero” y “abuelo republicano”, así que la cosa quedó sosita), sino en el número de asistentes. Es más fácil acertar una quiniela de 14 que saber cuántas personas acudieron. Entre 60.000 y dos millones, no vale aquello de hacer la media aritmética. Allí estuvo el PP, UPN, las asociaciones de la familia, los curas de sotana rancia y los de birrete, la COPE, María Ostiz y (¡cielos!) Minerva Piquero (con lo buena que está); y probablemente andarían por ahí el Foro de Ermua y la AVT, que no se pierden una por si acaso pueden usarla en beneficio propio. El PNV, pese a ser un partido católico por convicción, no estuvo. Andaban en San Sebastián, hay que entenderlo.
Y lo mismo, esa falta del don de la ubicuidad, le pasó a UPN el domingo en el Nafarroa Oinez. Aunque el tren Pamplona – Madrid para la mani, al módico precio de 25 euros ida y vuelta, hacía el viaje en el día, muchos no llegaron a tiempo para ir luego a la Sakana. Seguro que querían estar, no les quepa duda. Eso sí: a más de uno se le habrían abierto las carnes al ver que la pancarta de despedida a los participantes en el Oinez, ésa en la que ponía “Eskerrik asko”, la colocaron en un puente de la autovía A-10. En el mismo sitio, vaya, donde se ponen las de AHT Gelditu o las de Non da Jon. Como algun juez tenga conocimiento de que se comparten espacios, lo mismo Paz de Ziganda se ahorra la organización de la fiesta del 2010. Ojito.
Al final, viendo el Teleberri, uno no sabe si en Sakana se pedían todos los derechos para los que aborten o si en Madrid pedían euskera para todos. Pero, ¡qué quieren que les diga!, esto le da vidilla al sábado y al domingo. Los fines de semana que se limitan a fútbol y misa son aburridos. Ponga una mani, o dos, y todas las televisiones se lo agradecerán. Si hay hostias aparte de las obleas litúrgicas, ni les cuento.
11 comentarios: on "Todos los abortos para el euskera (o algo ansí)"
Guerra de cifras: En Madrid para los marchantes hay dos millones y les cuentan desde el cielo 55.316, cifra menor de la que los organizadores del abrazo nacionata dicen que desfilaron por Donostitlan, por un recorrido con menos metros cuadrados ocupados que en los madriles, pero sin ser retratados. Normal, viendo cómo son en realidad las asistencias a las manifas, mejor invocar la pérdida del alma al pasar por el obturador para que no te digan que en realidad estás tres y el de la moto, que el ojo engaña mucho. Malos tiempos se avecinan para las nuevas aglomeraciones, que todas van a quedar en ridículo con las nuevas tecnologías.
En el Oinez no hay estos problemas, ni los habrá, siempre van cien mil, ni uno más y ni uno menos... y a ver quién tiene cojones decir lo contrario.
Pues la policia foral en el diario de nawarra diciendo que 50.000
Eloy Rabo: eres el puto amo.
Yo de mayor quiero ser como tú.
Kupueta, eso no puede ser porque no puede ser. ¿50.000? Esa es una cifra partidista. Todos sabemos que desde el primer Oinez son cien mil, por lo tanto cien mil son, ni uno más ni uno menos. Hombre, por dios, hasta ahí podríamos llegar. La tradición es la tradición... y como las albarcas, por supuesto.
Mil perdones, eso me pasa por leer. Si son cien mil, son cien mil, ahi no cabe duda. Menos mal que no fueron los "euskaltzales" que no querian participar en una fiesta para una ikastola privada, si no, menudo follon para hacer las cuentas. Muchas gracias a ellos y a seguir asi que en Navarra semos asin y vamos sobraos en temas de euskera. Hurrengo aipua euskaraz?
Kupueta, ¿pero qué me estás diciendo, que entre euskaldunes también hay clases y que unas chulean a las otras? No me lo creo.
Por los cien mil hijos de San Koldo, menuda infamia.
A este paso va a salir cualquiera a afirmar también que lo de poner Nafarroa junto a Oinez es una simple coartada, y que se haga desfilar la ikurriña con albarcas y calceto blanco gordo en una fiesta por el Euskera es una politización inadmisible.
Qué desfachatez. Exijo una rectificación inmediata.
Cien mil perdones, no se en que estaria pensando.....no se repetira.
Un saludo cordial.
Tradición o muerte. Como dios manda.
Bien está lo que bien acaba.
A cuento del Oinez,quisiera preguntar,a quien lo sepa,por qué existen ikastolas en zonas que tienen educación pública en euskara,con todo el dinero,molestias,y esfuerzos que suponen para los padres y organizadores. Y que conste que lo pregunto sin malicia,de hecho hasta poco pensaba que sólo existían en las zonas no vascófonas
Por lo mismo que existen colegios privados en las zonas en las que existen centros públicos, o clínicas privadas enfrente de hospitales públicos: porque siempre hay quien cree que si pagas más, te atienden/enseñan más y mejor.
Pero entonces estás diciendo que el Oinez es una fiesta de pijos de colegio de pago, como los del Redín, y eso es una falacia.
En la enseñanza del euskera no hay clases ni contradicciones. Que una familia puede pagar, pues paga; que otra no, pues no paga. El Oinez es una fiesta para construir polideportivos en euskera. ¿Tan difícil es de entender?
Lo que se debería de controlar un poco mejor es el tema de la comunicación, que este año se han visto demasiados bokatas traídos de casa, y no es sano, que con ese peso a la espalda se pierde fuelle para construir país.
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