
Fotoperiodista en Portugal
¡Que levante la mano quien se compra castañas en invierno sólo para poder calentarse las manos! O aquellos para los que el olor de esta fruta cocinada les recuerda a las Navidades, al frío y la nieve. En Lisboa, nada que ver. De hecho, las calles no huelen a castañas ni aun con 3 puestos de venta seguidos. Lo que producen son grandísimas humaredas blancas producto de la fritura de este fruto.

Porque, sí, ¡las fríen! Las cocinan tanto que incluso no hace falta casi ni pelarlas. La cascara deja a un lado su color marrón natural para convertirse en blanco. ¡Una castaña blanca! ¿Dónde se ha visto eso? Ah sí, en Lisboa.

A pesar de todo, se venden; y son generalmente portugueses o residentes en Portugal los que las compran. No creo que a los turistas les guste mucho comer castañas blancas.
Por tanto a quien le guste comer este fruto y que sobre todo no le importe como está cocinado o de que color es su piel, la capital portuguesa es el mejor lugar: se venden de octubre a marzo.
2 comentarios: on "Retratos lisboetas: Adelina, la castañera"
Molt a prop de casa he vist una castanyera que el carrer ha perfumat amb l'olor del seu torrat.
Castanyera,castanyera vens castanyes de primera!.
Les castanyes ben torrades calentetes i pelades ens escalfen bé les mans i no cal posar-se guants.
Popular catalana.
Cerca de casa he visto una castañera que la calle ha perfumado con olor ha torrado.
Castañera,castañera vendes castañas de primera!.
Las castañas bien torradas calentitas y peladas nos calientan bien las manos y de guantes nos ahorramos.
Traducción personal.
Desde el jardín del Pirineo.
Gran entelequia la de la traducción del verbo torrar del catalán al castellano, porque tostar no es lo mismo que asar, ¿pero acaso el asado de las castañas no se asemeja a un proceso de tostado?
Quizás la Barcina pueda sacarnos de dudas...
De todos modos es de agradecer un artículo calentito, después de la sensación de frío que nos ha transmitido Leire.
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