- ¿Por qué no gobernáis en Cisjordania si ganasteis las elecciones?
- Obtuvimos el 60% de los asientos del Consejo Legislativo Palestino (PLC, Parlamento). Pero casi todo el mundo, Estados Unidos el primero, pero también Europa, Naciones Unidas y el cuarteto rechazaron los resultados y decidieron no tratar con el 10º gobierno palestino. Cuando llegamos al poder vimos que no podíamos usar del dinero del Fondo de Inversión porque el gobierno de Fatah había excedido sus límites de créditos de bancos. No podíamos pedir dinero prestado y además los israelíes dejaron de transferirnos nuestro dinero de impuestos, unos 70 millones de dólares al mes. Pudimos recolectar dinero de algunos países árabes que nos apoyaron y metimos todo este dinero en la cuenta de la Autoridad en el Banco Árabe de El Cairo, pero no pudimos transferir el dinero a Cisjordania porque Estados Unidos declaró que cualquier banco en Europa que nos ayudase a transferir ese dinero sería boicoteado por los bancos americanos. No pararon hasta sacar a Hamás del gobierno y poner a quien ellos querían.
- ¿Cuántos asientos ocupáis en el Consejo Legislativo Palestino de acuerdo con el resultado de las elecciones?
- 74 escaños más 1 independiente que nos apoya (El PLC tiene 132 asientos).
- ¿Por qué no funciona el Parlamento?
- La primera razón es que Israel, a los 4 o 5 meses de la celebración de las elecciones, encarceló a unos 40 miembros de Hamas, y sólo 36 podían acudir al Parlamento. Esto sucedió a raíz de que a finales de junio, el movimiento de resistencia arrestó al soldado Guilad Shalit, que era un soldado israelí, operador de tanque, que atacaba Gaza en la frontera. Esa fue la excusa para echar abajo el gobierno de Hamas. Los arrestos no fueron una cuestión de seguridad, sino una decisión política cuya finalidad era fortalecer a Abbas y devolver a Fatah el poder. Por otro lado, tras las detenciones, Fatah pasó a ser mayoría en el PLC y se aferró a ella.
- ¿Usted estaba entre los encarcelados?
- Sí, metieron en la cárcel a ocho ministros, entre ellos yo mismo. Pasé allí 33 meses, y soy de los que antes ha salido.
- ¿Por qué no hay acuerdo para liberar al soldado israelí Shalit?
- Los israelíes se pusieron de acuerdo con algunas condiciones en diciembre pero luego se echaron atrás ante los mediadores alemanes. El problema es que quieren mandar a la mayoría de los presos palestinos al exilio. Hamás aceptó que se mandase a algunos de ellos al exilio por un tiempo limitado, pero Israel insiste en que sean la mayoría y que sean exiliados para siempre.
- ¿Cómo de importante es para Hamas el éxito de este intercambio?
- Sería una victoria importante; no sería el fin de la lucha, pero sería un gran paso adelante porque, durante 18 años, las negociaciones no han conseguido liberar a muchos prisioneros; hay algunos que están en prisión desde antes de Oslo y deberían haber sido liberados después de firmar los acuerdos, pero no fue así. Ahora, su única oportunidad de salir es a través de este intercambio.
- ¿Cómo acabó Hamas tomando el control absoluto de Gaza y perdiendo todo el de Cisjordania?
- Tras el acuerdo de la Meca, auspiciado por Arabia Saudí, Fatah y Hamas creamos un gobierno de unidad nacional con el fin de que el mundo dejase de boicotear a Palestina. Este gobierno funcionó durante casi tres meses. Pero después, Mohamed Dahlan (parlamentario del PLC por Fatah) y Keith Dayton (general estadounidense nombrado por Bush Coordinador de la Seguridad de EEUU en los Territorios Palestinos, mantenido por Obama) comenzaron a llevar a cabo asesinatos selectivos, ataques contra las oficinas del gobierno y contra Hamas, con el fin de devolverle el poder a Fatah. Provocaron la desobediencia general de las fuerzas de seguridad a principios de junio 2007 y Hamas tuvo que tomar el control de la situación para impedir que el plan de Dayton se materializase.
- ¿Qué opina Israel de la reconciliación entre palestinos?
- Israel presiona a Fatah para que no firme la reconciliación con Hamas, pero por otro lado le dice que no representa a todos los palestinos porque Hamas controla Gaza. La situación es perfecta para Israel.
- ¿Por qué Hamas no firma el papel de reconciliación con Fatah?
- Creemos que el papel, tal como está, no se puede aceptar. Durante las negociaciones entre Egipto, Fatah y Hamás alcanzamos algunos puntos de acuerdo. Pero cuando finalmente vimos el documento redactado, nos encontramos con varias cosas que no nos gustaron. Con algunos puntos no estábamos de acuerdo, y otros con los que sí estábamos de acuerdo habían sido eliminados.
- ¿Por ejemplo?
- Hay especialmente dos puntos que no podemos aceptar. Uno es que habíamos acordado que todos los prisioneros políticos de ambos bandos se liberarían al firmar el acuerdo, incluso antes. Pero el documento cambió este punto por “la mayoría de ellos serán liberados cuando lo firmemos”. Los otros permanecerán en prisión y los egipcios formarán un comité para analizar su situación. Esto significa que pueden llegar las elecciones y haya todavía prisioneros políticos en la cárcel. No podemos aceptarlo. El segundo punto tiene que ver con los damnificados por los enfrentamientos. Mucha gente fue asesinada, se confiscaron y se destruyeron propiedades, hubo heridos, torturados, instituciones cerradas, empleados que perdieron su trabajo... Acordamos en un principio que todo esto sería compensado. Pero ahora en el documento hay condiciones, como que la compensación dependerá de la capacidad de los fondos y que no deberá afectar al presupuesto. Estas condiciones pueden no traer la compensación nunca. ¿Cómo nos vamos a reconciliar si no compensamos a las personas afectadas? Se vengarán por su cuenta. ¿Cómo no vas a devolver el puesto de trabajo a una persona al que se lo quitaste por votar a un determinado grupo político?
- ¿Cómo de importante es para el futuro de Palestina la reconciliación entre Hamas y Fatah?
- Creemos que es un comienzo para un nuevo diálogo y una nueva forma de relacionarnos. Hemos competido por la autoridad y el control, y ahora debemos tratar de convertirnos en compañeros. Todos necesitamos esta unidad.
- ¿Por qué Fatah firmó tan rápidamente?
- Sólo quería conseguir la celebración de elecciones cuanto antes.
- ¿Y cuándo van a ser las elecciones?
- Yo creo que ya no dejarán que haya unas elecciones justas y limpias nunca más. Israel y occidente quieren un resultado diseñado. En todo caso, no se dan las condiciones para hacer unas elecciones a corto plazo. Los que se presentaron a las elecciones en 2006 están ahora en prisión por el hecho de haberse presentado y haber ganado. A pie de calle, si sospechan que votaste por nosotros pasas a estar bajo el punto de mira, no puedes encontrar un trabajo, no puedes ni siquiera montar un negocio privado. Ahora mismo no se nos permite tener encuentros públicos ni podemos hacer manifestaciones contra Israel. ¿Cómo podemos organizar unas elecciones así?
- ¿Cuál era vuestro programa electoral y vuestro proyecto político?
- Intentar que la Autoridad Palestina no llegase a un acuerdo con Israel que no tuviese en cuenta los derechos de los palestinos. Queríamos un estado soberano viable, con sus propios recursos naturales y económicos, sobre las fronteras del 67, que se fueran todas las fuerzas militares israelíes de Cisjordania y Gaza, eliminar todos los asentamientos y designar Jerusalén Este como capital palestina. Nada que no esté ratificado por las resoluciones de la ONU. No reconocemos ni el Tratado de Oslo ni la Hoja de Ruta porque este camino no nos lleva a ningún lado, como se ha demostrado. Incluso ahora Abbas se da cuenta.
- Y en el plano social, ¿quiere Hamas construir un estado islámico?
- Creo que ahora está bastante claro que no. Si al final la gente lo elige, se podría probar, pero no vamos a forzar a nadie a vivir de la forma islámica. Y por eso no forzamos a las mujeres a llevar un velo, si lo llevan es porque lo eligen. Esto lo hemos declarado muchas veces, incluso en Gaza ahora mismo no tenemos un estado islámico, a pesar de que tenemos la mayoría. Y el que diga lo contrario debe probarlo.
- ¿Hay alguna posibilidad de que Israel acepte desmantelar todos sus asentamientos?
- Mi visión es que si el mundo quiere acabar con el problema en Oriente Medio, debe dejar que los palestinos recuperen sus derechos y estos sean respetados. Nosotros no podemos hacer más concesiones. Antes de 1948 todo esto era palestino, y la OLP ya hizo la principal concesión rebajando sus pretensiones a un estado en las fronteras del 67. Nosotros, Hamás, hemos aceptado también rebajar nuestras pretensiones a la línea verde (lo llevamos diciendo desde 1999) para estar unidos en la estrategia junto con todos los otros grupos palestinos. Pero incluso habiendo bajado nuestras pretensiones a las fronteras de la línea verde, Estados Unidos y Europa no son capaces de forzar a Israel a retirarse. Negocian qué asentamientos quitar y cuáles dejar. Están negociando qué vecindades de Jerusalén Este serán controladas por la Autoridad Palestina, cuáles por las israelíes y cuáles las comunes. Como dividir el agua de Cisjordania, cómo controlar las fronteras y cómo las vigilará Israel. El resultado de eso no puede ser un estado palestino viable.
- ¿Cuál es el modo de conseguir los objetivos de Hamas? ¿La lucha armada es una opción?
- Todas las opciones son válidas. La Ley Internacional nos garantiza todas las opciones incluyendo la resistencia militar, la popular y las negociaciones. Nuestra situación es muy clara: La Ley Internacional dice que esta ocupación es ilegal, porque es militar, fue una tierra tomada por la fuerza. Si lo comparamos con cuando Irak invadió Kuwait, podemos ver la diferencia de intereses en el mundo; Israel parece estar por encima de todas las leyes internacionales. Y el mundo tiene que entender que los palestinos no quieren aceptar menos de un mínimo, y hasta entonces seguiremos luchando. No habrá paz en la región.
- ¿Los cohetes lanzados por Hamas desde Gaza son parte de la resistencia?
- En principio todo está permitido por la Ley Internacional, se te permite hacer cualquier cosa que puedas para resistir la ocupación.
Resistencia y violencia
- Una persona de Fatah ¿puede vivir tranquila en Gaza?
- Generalmente sí. Me voy a referir al informe de Human Rights Watch, que dice que existen violaciones de derechos en Gaza y en Cisjordania, pero señala que las violaciones en Gaza están disminuyendo y que el margen que Fatah tiene en Gaza es más amplio que el que Hamas tiene en Cisjordania. Fatah en Gaza sigue teniendo su organización. Hay como 30 o 40 miembros de Fatah en prisión y todos están acusados de violaciones serias, algunos incluso de intentar asesinar al primer ministro. En Cisjordania nosotros no tenemos ninguna estructura política ni instituciones, nuestra gente está repartida entre las prisiones israelíes y las palestinas. Los únicos que podemos hablar ahora somos los miembros del Parlamento, porque no nos pueden arrestar tan directamente. Pero aún así acosan a nuestras familias, mis dos hijos estuvieron en la cárcel varias veces. Al personal de esta oficina lo han arrestado ya en tres o cuatro ocasiones. No estamos autorizados a trabajar en el nombre de Hamas.
- ¿Qué piensas del auge de las manifestaciones pacíficas en Cisjordania?
- Sé que este tipo de resistencia es muy bien recibida por el público del mundo entero, especialmente por occidente, y a mí me parece totalmente aceptable. Pero es un movimiento muy débil que tardará mucho en conseguir objetivos. No puede ser la única forma de luchar contra la ocupación. Conseguirán atraer a las cámaras y quizá se pueda mostrar mejor al mundo qué es la ocupación, pero dudo que consiga acabar con el muro, la ocupación y la opresión.
- ¿Y cuál es la mejor forma de resistir?
- No soy capaz de decírtelo porque tampoco soy el que toma las decisiones, pero lo que pienso que lo mejor es tener primero una unidad nacional, de tal forma que tengas una estrategia única y nacional tanto para la resistencia como de cara a las negociaciones. Normalmente las negociaciones son el resultado de la resistencia, llegan después de que convences al ocupante de que la ocupación tiene un precio. En tiempo de negociaciones de paz, Israel ha colonizado a placer y ha continuado con su ocupación. Sin embargo, en tiempos de conflicto la seguridad se ha convertido en su primera prioridad y la construcción de asentamientos y la judeización de Jerusalén han pasado a un segundo plano y se han detenido.
- La última vez el precio a pagar fue alto, 1.400 muertos en Gaza durante el ataque de Israel en la Navidad de 2008/2009, la mitad civiles. ¿Valió la pena?
- Miles de palestinos han muerto y seguirán muriendo por causa del bloqueo que Israel impone a Gaza, pero eso no sale en la prensa. La comunidad internacional sólo se alarma cuando son los misiles los que los matan, cuando es algo visible. La verdad es que los gazauis no tienen muchas opciones.
- ¿Qué le parece a Hamás el movimiento de boicot contra Israel?
- Creo que es una gran arma para ayudar a la gente palestina. El boicot árabe fue muy efectivo, por eso ahora la primera condición que pone Israel para hablar con la OLP es que esta diga a los países árabes que frenen el boicot. Esperamos que el movimiento que se está construyendo ahora contra Israel alrededor del mundo siga creciendo, porque creo que esto hiere a los israelíes mucho más que otras actividades solidarias.
- ¿Qué opinión le merece a Hamás el informe Goldstone?
- A pesar de que no estoy de acuerdo con todos los detalles, creo que es el mejor informe que se ha hecho nunca. Ha sido la primera y única vez que alguien ha alzado la voz y ha dicho que Israel ha cometido crímenes de guerra. Los ha cometido siempre desde 1948, pero nunca nadie se había atrevido a decirlo. Esta es la primera vez que la comunidad internacional tiene la oportunidad de condenar a Israel, y los pasos que se deberían haber tomado después es llevarlo a un tribunal internacional para prevenir futuras masacres.
- El informe acusa también a Hamas de crímenes de guerra.
- No estoy de acuerdo con ello, no me gusta la forma en que trata la responsabilidad de la resistencia, como si hubiese sido una guerra entre dos estados con sus dos ejércitos. Creo que lo han hecho así para que la comunidad internacional piense que es un informe imparcial. Pero bueno, aún así pienso que es un buen informe.
- Varios líderes iraníes han abogado directa o indirectamente por la “destrucción de Israel”. Irán apoya a Hamás, quien a su vez apoya la resistencia violenta. Eso no genera confianza hacia Hamás en occidente.
- Yo no estoy de acuerdo con muchas cosas que dice Irán, pero yo no soy nadie para ir y decirles que no las digan. Preferiría ver a Irán hablando en un lenguaje diferente, más aceptable para Occidente, pero ese es su problema. Creo que si Occidente tratase a Irán como a un igual, podrían alcanzar una cooperación. Por otro lado, cuando quieres servir a la población que te ha votado pero no tienes el apoyo de nadie, cuando todo el mundo te bloquea tras ganar limpiamente unas elecciones, aceptas de buen grado la ayuda venga de donde venga, siempre que venga sin condiciones. De todas formas, Hamas somos demasiado pequeños como para que Irán pueda esperar algo de nosotros a cambio.
Derecho a convivir, no derecho a existir
- ¿Hamas reconoce el derecho de Israel a existir?
- Acepto que podemos negociar y tratar con Israel, pero no reconozco el derecho de Israel a existir. Nunca lo hemos reconocido. De todas formas existe ya y no necesita de mi reconocimiento. En el 48 tomó multitud de tierras por la fuerza que no eran suyas, luego ocupó Cisjordania y Gaza y sólo nos quiere como obra de mano barata para su economía. Los presidentes israelíes desde el más viejo hasta el más joven, todos vinieron de otros países -Polonia, Rusia, Estados Unidos, Checoslovaquia, etc...- para hacerse con este trozo de tierra, que era palestina, y yo no voy a decir tras 60 años de lucha que estábamos equivocados porque ese trozo de tierra era realmente judío, porque no es verdad. Si lo que tenemos que hacer es vivir en dos estados uno junto al otro, de acuerdo, lo aceptamos. Reconocemos la existencia de Israel porque es un hecho que existe, pero no reconocemos que tenga el derecho a esa existencia.
- Si mañana se resolviese el conflicto y se creasen dos estados con fronteras definidas y todo el mundo quedase más o menos contento, ¿entonces reconoceríais el derecho de Israel a existir?
- No. Comenzaríamos a vivir bien, normalizaríamos nuestras relaciones con Israel, pero nunca diremos que tenían derecho a hacer lo que hicieron. Si ahora tú cuando te vayas me robas esta agenda, cuando la tengas en tu casa, ¿significa que es tuya? No. Esta es nuestra postura. Si en el futuro se forman los dos estados y se tratan de una manera adecuada, hay relaciones cordiales y se respetan mutuamente, no habrá razón para la guerra ni para ir a decir que este trozo de tierra era mía y quiero que me la devuelvas. Pero antes de todo eso se tiene que volver a las fronteras del 67, crear los dos estados y después establecer las relaciones políticas, sociales y económicas. Y entonces testar este acuerdo y ver si va a ser duradero o no, y creo que depende del comportamiento de los israelíes más que del nuestro.
0 comentarios: on "Desde Palestina: Omar Abdul Razeq (Hamas)"
Publicar un comentario